domingo, 18 de mayo de 2014

ACTIVIDADES LUDICAS


Las Actividades Lúdicas

Para Huizinga, citada por Dávila (2003):
El juego es una acción o actividad voluntaria que se desarrolla sin interés material, realizada dentro de ciertos límites fijos de tiempo y espacio, según una regla libremente consentida pero completamente imperiosa, provista de un fin en sí misma y acompañada de un sentimiento de tensión y alegría. (P. 7).
En términos históricos, se puede señalar con Chateau, que sí existen en primer lugar ciertos juegos infantiles que no son más que antiguos juegos abandonados por los adultos pues en el siglo XIV, la corte de Isabel de Baviera se divertía con los palillos. Más tarde entre los años 1745 y 1755, la nobleza estaba encaprichada con los títeres y se pagaba hasta 1500 libras por un títere de Boucher.
Asimismo, el juego de "Diablo", importado de china estuvo en gran boga a principios del siglo XIX y volvió a estar de moda más recientemente. El juego de los policías y los ladrones era practicado en el siglo XVIII, por los medios más aristocráticos de Italia.
En cuanto al origen de algunos juegos el autor precitado, señala que el sonajero, el boliche y el trompo han sido considerados como juegos que se remontan hasta los primitivos. De la misma forma, los esquimales practicaban el juego mágico del boliche sin ninguna significación mágica, mientras que la prohibición de cazar al día siguiente constituye testimonio de la persistencia de un tabú cuyo sentido, aún hoy día, se ignora constituyendo estudio de los etnólogos su determinación, de donde se desprende que los juegos nos permiten a veces sondear la historia ignorada de algunas civilizaciones.
De allí que Dávila (2003). Indica que el juego como expresión de las estrategias visuales había sido ya usado en el siglo XVIII, dando origen a las obras híbridas o Cadavre Exquis de los subrealistas, una versión del juego de salón llamado cabeza, cuerpo y piernas; para su realización, cada artista dibujaba objetos, paisajes y detalles de figuras humanas y animales, en una parte del lienzo o cartón. Una vez terminada su parte, se cubría con papel, para que el siguiente pintor no sufriera la influencia de la obra anterior. Igual ocurre en el juego cabeza, cuerpo y piernas, cada jugador dibuja en un papel una parte del cuerpo y después se dobla para que el siguiente no vea lo que ha hecho el anterior.
Es así como el ejemplo más primitivo de este juego, data de 1778, y es una complicada imagen plegadiza de Lázaro y Epulón, con un esqueleto. Históricamente la especie humana ha parado de la actividad lúdica a la estética. En el caso de las danzas, éstas antes de constituir manifestación artística, constituyeron sin duda un juego, esto lo revela el hecho del origen lúdico del arte, ya que este nace por el juego.
Según Dávila (2003), María Montessori fue una de las primeras en utilizar juegos básicos y ejercicios lúdicos para desarrollar la discriminación perceptiva y táctil. Para ella, el juego es "una actividad libre, ordenada de tal manera que conduzca a una finalidad definida". (P. 9).
El autor Pavey (1999), ha llegado a determinar que "el término game en inglés, juego en español, viene de la raíz indoeuropea ghem, que significa saltar de alegría, de donde se desprende que el juego en esencia debe brindar la oportunidad de divertirse y disfrutar". (P. 25).
Basados en los juegos y actividades artísticas como medio educativo eficaz, se ha llegado a realizar propuestas educativas para la enseñanza existiendo en Gran Bretaña escuelas públicas que llevan más de 10 años funcionando sobre esta base, habiendo las autoridades escolares introduciendo planes de estudios centrados en conceptos, formados por ideas fundamentales que abarcan todas las disciplinas académicas como por ejemplo, jerarquía y complementariedad, simetría y asimetría.
Por otra parte, algunas investigaciones se han abocado al estudio de la historia del pensamiento filosófico y pedagógico en relación con las actividades lúdicas. Así encontramos que el juego entre las sociedades más primitivas tenía una caracterización propias del las culturas de esas agrupaciones: se luchaba más por la supervivencia que por la recreación y diversas como placer natural según Nuñez de A. (2000), afirma que el juego no era una actividad de esparcimiento y relax como lo es actualmente sino competitivo.
Sin embargo, Platón (427- 348), citado por la autora plantea ya varios postulados de lo que hoy en día es educar a través de la actividad lúdica. Decía Platón que la educación debía comenzar a los 7 años de edad, y que los primeros años de vida del niño debían estar ocupados en juegos educativos mixtos, bajo vigilancia del adulto y en jardines infantiles.
Asimismo, Platón indica que preferían darle al juego un valor pedagógico netamente educativo y recreativo más que competitivo. Pensaba que esto producía daño en la formación del niño y el joven. En cuanto al pensamiento matemático ya Platón introduce la enseñanza de esta ciencia a través de actividades lúdicas y aplicaciones educativas.
Más tarde los Egipcios romanos, mayor y otras comunidades de la antigüedad, utilizaban el juego como herramienta de enseñanza a las generaciones más jóvenes y como instrumento de recreación. Las primeras muñecas de trapo conocidas proceden del alto Egipto. De igual forma Sarazanas y Bandet, (1972), acotan la arcilla ha servido para moldear muñecos y carritos cuyo origen se remonta al mundo griego y romano. Igualmente se ha encontrado figuritas de soldados, caballos y canicas (metras) que se cree tengan la misma procedencia.
En la Grecia antigua, los primeros años de su vida se dedicaban al juego y a la recreación. El juego se podía imaginar como una actividad lúdica que enseña al niño a manejar su energía vital, descubrir y disciplinar sus reacciones motrices e imitar lo que el adulto hacia. Los autores precitados expresan sin embargo, que la actividad lúdica era considerada banal y poca seria.
Del mismo modo, con el cristianismo, el juego adopta la consideración de profano e inmoral y desprovisto de todo significado. Es después del siglo XVI que el juego educativo adquiere importancia y es retomado por humanistas y, básicamente, colegios Jesuitas, quienes advierten el valor educativo del juego en el quehacer pedagógico. Se comienza a ver el juego como herramienta en la enseñanza de la lectura, el dibujo, lageometría y la aritmética. Comenio (1592-1671) citado por Montenegro (2000), resume su método de enseñanza en la que llamó método natural: naturalidad, intuición y auto-actividad, que no es otra cosa que respetar las leyes naturales, el desarrollo del niño, fomentando su curiosidad por el entorno en general. El juego se constituyó así en elemento básico de esta postura filosófica de la educación.
Dentro de esa marca el ingles John Lohn Locke (1632- 1704), acentuó la necesidad de las experiencias sensoriales en el aprendizaje natural del niño, para él, el niño es una tabla rara que va llenando cada momento de su experiencia personal con todo aquello que le provee su medio. De esta forma, la actividad lúdica debe guiar ese proceso en la consecución de un aprendizaje adecuado de pautas y normas sociales acordes a su momento histórico, todo ello a través de la observación y la experimentación.
Por otra parte Montenegro (2000), hace referencia a Jean Jorgues Rousear en el siglo XVIII, el cual dice en su novela Emilio que a los niños se les debe permitir desarrollarse naturalmente, sin restrinciones y que la niñez debe ser valorada como una etapa importante en la vida. Pensando que el ser era bueno por naturaleza y que el niño/niña aprendía ejercitando los sentidos. Instrumento del mismo (el juguete) eran importantes en esa posición filosófica de la educación, como herramienta que ejercitaban esos sentidos.
Pestalozzi (1846-1827), educador Suizo del siglo XIX citado por Montenegro (2000), sugirió que el niño debe experimentar con objetos concretos antes que pueda formar ideas abstractas. Abre un nuevo rumbo a la educación moderna; la escuela para él es una verdadera sociedad generadora de pautas, normas, así como responsabilidad y cooperación. El juego es un elemento pedagógico que genera o enriquece esas pautas sociales.
El norteamericano Sewey (1859-1952), citado por Nuñez de A. (2000), con su obra impulsa aún más esta posición pedagógica. Para él los objetos sólo tienen significado para el niño, cuando han sido percibidos y experienciados. Dentro de este mismo orden de ideas Dewey sostiene que "El juego crea un ambiente natural del niño, en tanto que las referencias abstractas y remotas no corresponden a sus intereses



Leer más: http://www.monografias.com/trabajos98/actividades-ludicas-y-su-importancia-ninos-y-ninas-educacion-inicial/actividades-ludicas-y-su-importancia-ninos-y-ninas-educacion-inicial.shtml#ixzz325MSyAxX